jueves, 28 de mayo de 2009

Caña seca y un membrillo

Negrita yace asustada, la hormiga se le durmió. -Dios ya no quiere que baile...- me dijo y me sofocó.
¡Vamos negrita, bailá hasta el fin! Vamos, negrita, hacelo por mí.
La curva no se ha mojado, ni patinó mi animal. Morena, vi tu camisa mojada, secando y arrebaté!
Fuera pechito dañino, milagro te hará cambiar, un dedalito de caña, soplada y este ritmo zumbador.
Tum-tum te agita morena, tu cuerpo se impacientó. -¡Dios ya no me aguanta quieta!- me dijo ¡corre, corrida, apuró!.
¡Vamos negrita, bailá hasta el fin! Vamos, negrita, hacelo por mí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario